domingo, 21 de agosto de 2016

Cede las riendas a tu hijo cuando decore su habitación

No es fácil para las madres aceptar que el estilo del cuarto de los adolescentes sea diferente al resto de la casa, pero deben asumir que ellos tienen personalidad y gustos diferentes. Oriéntalo sobre la utilidad de algunos muebles y persuádelo para que siempre lo tenga ordenado.
por HERCILIA GARNICA

Así como tiene determinación para elegir su ropa y decidir que prefiere el chocolate a la fresa cuando van a comer helados, tu hijo tiene todo el potencial y el deseo, además, para decidir cómo decorar su cuarto, al menos escoger los detalles más importantes y la temática central del estilo que llevará el lugar donde duerme y pasa la mayor parte del tiempo, cuando está en casa.

Esa tarea casi siempre la quieren acaparar las madres y por las razones que sean, económicas o de otra índole (es más fácil limpiar sin afiches pegados a la pared y sin  la cantidad de collares colgados detrás de la puerta), pugnan por intervenir en el orden que se le dará a las habitaciones de los hijos.

Acá te ofrecemos algunas recomendaciones para que el reto de decorar el cuarto de los jóvenes sea felizmente superado. Ellos tienen sus propias ideas de lo que está a la moda y lo que ya no lo está y debes respetarlas, aunque sientas que algunas no puedes aceptarlas, bajo ninguna circunstancia, porque son desacertadas.  Es decir,  la experiencia puede convertirse en una batalla sobre estilos, pero dependerá de ambos, la madre y sus hijos, que sea, en realidad, una experiencia productiva que valga la pena repetir.

Aprender a escuchar
Antes de empezar a decorar, habla con tu hijo o hija  y comparte ideas para decorar su habitación. Si notas que no están muy interesados en la redecoración , dale un vistazo a su cuarto y descubre sus cosas favoritas. ¿Hay un deporte que le gusta, una banda o una película? Ofrece objetos que tengan relación con sus aficiones  y ese será el primer paso para que dé sus opiniones.  Discute sobre los colores, el estilo y los muebles que usarán y deja que tomen sus propias decisiones. Muéstrale  fotografías y catálogos con distintos estilos para ver cuál cuadra más con sus gustos.

Ese intercambio de ideas te dará la oportunidad de opinar, pero sabes que la decisión final debe estar en manos de ellos, a menos que la elección sea muy costosa o descabellada.
El incluir a tu adolescente es probablemente la parte más importante de la negociación. Su habitación es su mundo, y si tu tomas todas las decisiones, seguramente no estarán muy contentos con el resultado. Ve de compras con tu hijo o hija a tiendas de muebles y decoración para que se inspiren y cuando comiencen las "obras" pinten juntos la habitación o que él cuelgue fotos, cuadros o afiches para que se sienta partícipe de su propio espacio.

Definir funciones
Piensa en las actividades que  tu hijo desarrollará en el cuarto. ¿Será el lugar principal para estudiar, juntarse con amigos, practicar un instrumento o relajarse? La respuesta te dará pistas sobre los  muebles y elementos que se necesitarán en  la habitación. Incluye sillas y sofás si la habitación se usará para reunirse con compañeros de clase y amigos. Si el cuarto, más bien, será aprovechado  para estudiar, entonces es importante contar con un  buen escritorio y una excelente iluminación para  leer en la noche.  También incorpora una estantería para colocar libros, carpetas y otros objetos. Es decir, es importante pensar en un espacio cómodo y práctico que sirva para descansar y estudiar.


Reciclar y pintar
Para que la decoración no salga muy cara, revisa toda la casa para ver si encuentras algún mueble que puedas aprovechar. Se pinta de otros colores, se le da otro estilo y podrá ser incorporado al cuarto de tu hijo
.
Antes de emprender los cambios precisa de cuánto espacio disponen y la forma geométrica que tiene el dormitorio.

Cuanto más pequeño sea el cuarto se necesitarán más muebles funcionales que puedan cubrir más necesidades. Literas, camas nido o camas altas, que en la parte de abajo tienen un escritorio, son las ideales.

Chequea cuánta luz recibe la habitación. Si entra mucha luz natural se pueden pintar alguna o todas las paredes de un color un poco más intenso ya que la claridad ayudará a matizar el color. Si tu hijo se decide por un tono muy estridente que no te convence trata de que acceda a pintar el resto del cuarto con un color más suave como blanco o beige, y que una sola pared quede como el la eligió. El techo siempre debería pintarse de un color claro para lograr un mayor contraste.

No pierdas de vista que aunque lleguen a un acuerdo con el color de la pintura luego la pared, con toda seguridad, será cubierta con afiches, fotos o incluso graffitis y todos esos detalles adicionales harán que la habitación se vea más pequeña. En esta fase del decorado puedes negociar que los posters no se vean deteriorados ni sucios.

Una buena opción, si logras convencerlos, es la de comprar vinilos decorativos. Algunos son de figuras geométricas, otros simulan las ramas de un árbol, y muchos representan los rostros y figuras de artistas que quizás, y con mucha suerte, tus hijos admiren.

También puedes ofrecerles un lugar para colgar fotos, postales, dibujos. Un cuadro de corcho con chinches funciona muy bien para tener el horario de clases, un calendario divertido, y las cosas por hacer.

Organizar
La organización es muy importante en los cuartos de niños y adolescentes, ya que hará más fácil el mantener la habitación limpia y ordenada. Es importante tener espacio en el clóset, que haya una canasta para la ropa sucia, y lugar para los juguetes y zapatos. Aprovecha las paredes para colocar repisas donde tus hijos puedan guardar sus pertenencias.

Procura que también puedan haber cajas, cajones bajo la cama nido, contenedores, estanterías y baúles. Los adolescentes tienen muchas cosas que guardar y cuanto más lugares tengan para hacerlo mejor.

También es recomendable tener pufs, sillones cómodos, cojines para hacer más confortable la estancia del adolescente y de sus amigos o compañeros que lo visiten para estudiar o jugar.

Espacios compartidos
¿Tienes hijos que comparten un cuarto o que lo comenzarán a compartir dentro de poco? Es importante no solo que tengas en cuenta accesorios y colores al decorar su habitación, sino cómo congeniar  los gustos de los dos.

Habla con ellos al mismo tiempo, para que tengan oportunidad de discutir sus gustos entre ellos, pero dales oportunidad de que puedan hablar de sus propias preferencias también. Consúltalos sobre los colores de su preferencia y cómo quieren que quede separado el espacio.

Cuando llegue el momento de elegir el tema para una habitación de jóvenes de diferente sexo tienes dos opciones, puedes usar un tema unisex o dos temas diferentes. El unisex es más fácil de decorar, aunque quedará menos personalizado. Si, en cambio, se deciden por dos estilos diferentes necesitarán, de todos modos, algún elemento que los una.

Es importante que cada uno tenga un pequeño espacio privado en la habitación. Puede ser un escritorio o una mesa.

También es bueno considerar usar cortinas para dividir el cuarto y darles privacidad cuando la necesiten.

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